Texto: Alvaro Izaguirre:
Las situaciones más hermosas de la vida, muchas veces no lo son por sí mismas, sino por con quienes se comparten.
Escribiré este articulo refiriéndome un sencillo radio de
transistores con banda "AM" únicamente, pero tenía la característica de poseer forma de libro con linterna incorporada y hojas para escribir notas, se trataba de un receptor marca
Henica, de origen hongkonés, tamaño bolsillo literalmente.
Una característica de este aparatito era que al abrir la
tapa de las baterías, se podía ver la tarjeta de circuito del radio.
Junto a mi hermana, mientras mi madre nos contaba algún
cuento, escuchábamos ese radio, cuando la amplitud modulada era el espectro radial de mayor notoriedad, no solo en Guatemala sino en todo el mundo.
Programas como "el club de los tecolotes" de Radio Rumbos, música
de Radio 560, La Voz del Hogar, Radio Festival, Panamericana, Super, Radio, Radio Progreso, entre otras, me estoy refiriendo a 1987 más o menos, en ese
entonces no habían muchas emisoras con transmisión las 24 horas, quizá solo radio
Ciros, hoy Radio Ranchera.